Del SEMA Show puedes esperar una gran cantidad de autos modificados, aunque dentro de ellos siempre encontrarás algunos que sobresale por todo lo que lleva y lo bien que se ve. Este año uno de ellos es el Dodge Super Charger de 1968.
Este auto lleva el nuevo motor que Mopar presentó, el Hellephant, una máquina capaz de producir 1,000 hp y 950 lb-pie de par. Todo gracias a las modificaciones que lleva y el supercargador gigantesco que le han dado.
Además de tan bestial motor, que por cierto, se puede comprar en kit para poner en el auto que se te antoje; también recibió cambio de imagen profundo. Conservaron algunos detalles del modelo original como la parrilla que se extiende de extremo a extremo y que oculta los faros. Sin embargo, en el modelo original los extremos se abrían para abrir paso a los faros, en este caso, los faros iluminan a través de la parrilla.
En la parte trasera básicamente las calaveras fueros sustituidas por los escapes. La altura general del auto bajó en 2.5" y la distancia entre ejes fue modificada para mejorar su estabilidad, fuera de ello recibe varias piezas nuevas para hacerlo ver completamente agresivo.
Se le ha dado una jaula antivuelco, se quitó la banca trasera, y el volante y asientos delanteros se heredaron directamente del Dodge Viper. Para los amantes de los muscle cars, esta es una verdadera joya.
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