Poco a poco, la calidad de productos desarrollados para mercados específicos —como el latinoamericano o el asiático— comienza a ser suficiente como para que sus fabricantes se atrevan a probar suerte en mercados más exigentes, como el europeo o el estadounidense. En el caso concreto de Ford, el EcoSport fabricado en Brasil ya ha comenzado a venderse en Europa, y pronto podría entrar al mercado estadounidense.
Desde hace algunos meses, algunas unidades de prueba del Ford EcoSport han sido captadas por las carreteras de Estados Unidos. Esto, sumado al informe de Automotive News, podría desembocar en el lanzamiento del SUV más pequeño de Ford a finales de 2017, como modelo 2018.
Considerando que fabricantes como Chevrolet, Mazda, Fiat, Honda y muchos más ya cuentan con un SUV de esta categoría en el mercado yanqui, suena razonable la intención de Ford por llenar este vacío en su portafolio de productos. Sólo queda por definirse el motor con el que llegaría; el tres cilindros de 1.0 litros EcoBoost suena como una opción interesante.
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