Atos by Dodge, recordando al pequeño auto que movilizó a millones de personas
Hyundai entró a nuestro país en 2014 de forma independiente y con una ofensiva pensada en hacerse de una buena parte del mercado que las marcas con más tiempo aquí ya tenían, parte de esa estrategia fue traer a KIA. Mucho tiempo antes de 2014 la marca coreana ya tenía el ojo puesto en México y comenzó a probar éxito al vender un par de sus autos bajo a través de otra marca.
Esa otra marca era Dodge, en sus agencias podíamos conseguir el Atos, el Verna y el Attitude que era un Hyundai Accent. Por ello dichos autos nunca tuvieron como tal detalles como la parrilla o emblemas característicos de la marca estadounidense, todos portaban los logos de Hyundai.
El Atos era un vehículo increíblemente simple, era muy pequeño, ligero y apenas llevaba equipamiento básico. Con ello y su precio bajo, logró colocarse como uno de los más vendidos del país, usado mucho para taxi o auto de flotilla, pero también comprado por civiles.
Sus formas eran bastante peculiares parecía una especie de monovolumen muy corto, se veía muy alto y sus llantas eran muy pequeñas y delgadas; muchas personas lo llamaron igual que al famoso Renault 5, lo apodaron el "zapatito". Sí, cuando ese auto llegó a nuestro país, yo también lo llamé así, ante los ojos de un niño de primaria totalmente parecía un zapato con ruedas.
Tuvo dos actualzaciones en su ciclo de vida, para hacerlo ver más actual.
Llevaba rines de 13" y pocas cosas que intentarán denotar lujos, pues su misma construcción y mercado objetivo no le permitirían ir más lejos. En el interior la historia se repetía, el auto era muy simple, en los modelos más básicos no podías llevar aire acondicionado, y sus lujos eran justamente esos, el aire acondicionado, dirección hidráulica, seguros centralizados, cristales eléctricos sólo al frente, radio con cuatro bocinas y básicamente ya.
Los materiales eran los adecuados para su precio y segmento, el espacio de cajuela era reducido, pero a pesar de su tamaño, podía llevar bien a una persona alta al frente o en la parte trasera, ya que la altura del coche favorecía un acomodo peculiar que liberaba espacio suficiente en la banca trasera.
Cabe destacar que no tenía frenos ABS, ni control de tracción o estabilidad.
Recuerdo muy bien, que dicho auto causó mucha polémica en su momento por su altura, peso y capacidades, además de su aerodinámica. Estuvo en la mira de la opinión pública muchas veces porque se decía que una ráfaga fuerte de viento podía volcarlo en carretera. La realidad es que era un auto muy ligero y no tenía el mejor centro de gravedad del mundo, sin embargo, para que una ráfaga de viento lo pudiera volcar, se tendría que ir muy rápido, claro que podías sentir algún tirón o nerviosismo en el auto, pero salir volando por un trailer que pasara rápido o una ráfaga es más difícil.
Bajo el cofre llevó un motor de cuatro cilindros de 1.0 litro que apenas entregaba 55 hp y 60 lb-pie de torque, se acoplaba a una transmisión manual de 5 cambios, y en algunos mercados llegó a tener una automática de cuatro cambios. Era de tracción delantera y su peso era de apenas 880 kg.
En México estuvo disponible desde 1999 y hasta 2008, cuando Dodge comenzó a vender el i10 durante un par de años. El Atos by Dodge fue un coche que durante sus primeros años en México aún podía comprarse con menos de 100,000 pesos, aunque claro hablamos de condiciones económicas diferentes a las de ahora.
El Dodge Hyundai Atos será recordado en México por ser el primero coche de muchos, el coche con el que aprendieron a manejar o simplemente por haber sido un auto ideal para la ciudad, gracias a su tamaño, eficiencia y costos de reparación. También por haber ayudado a Dodge a levantar sus ventas.
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