Audi A1 1.5 TFSI, a prueba: el acceso a un mundo de experiencias nuevas (+video)

Marcas como Audi, Mercedes y BMW entendieron perfecto que para crecer su negocio debían llegar a más personas, por ello nos dieron modelos más pequeños que capturaran la esencia de la marca en un paquete compacto y no tan caro como sus modelos insignia. Audi hizo lo propio y nos dio al A1 que gracias a su gran éxito durante la primera generación, ha logrado aterrizar una segunda que mejora en muchos aspectos, acompáñanos a conocerlo.

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Una base bien conocida y sumamente versátil

La primera generación del A1 mostró ser un gran acierto para Audi, por ello para la segunda tenían que elevar la vara y pulir algunos detalles de ese primer modelo. Comenzaron por darle la plataforma MQB A0 de Grupo Volkswagen, gracias a ello creció 56 mm en total y aumento su distancia entre ejes, logrando darle una cabina considerablemente más amplia y que sobretodo permite tener más espacio en la parte trasera.

Otra ventaja de dicho cambio en plataforma es la mejora en el aspecto dinámico, pues al incrementar la rigidez de la misma, hay un mejor control del auto, pero de eso ya hablaremos un poco más adelante.

En cuanto a diseño, Audi se enfocó en darle un look más atractivo al auto, dejaron atrás el concepto con líneas más suaves y minimalistas para recurría a algo con más líneas de carácter y formas más afiladas en todos lados, el resultado es un coche de corte juvenil que a pesar de perder la carrocería de cinco puertas, puede atrapar tu mirada, especialmente si lo tienes en un color tan llamativo como el de nuestra unidad de pruebas.

Hablando de unidad de pruebas... el modelo que recibimos fue el A1 Ego 1.5 TFSI, se trata de la versión intermedia superior, por decirlo de alguna forma, pues sólo sobre él se coloca el tope de gama, el S-Line. Teniendo en cuenta esto, parte del equipo de serie de la variante Ego son los faros LED, rines de 17" y una fascia un poco más detallada. La carrocería bitono es un opcional para toda la gama, en este caso el color Amarillo Pitón combina de maravilla con el techo de color negro.

Por fuera cumple su objetivo de lucir más atractivo que coches subcompactos de marcas generalistas y es que además del emblema, los detalles personalizables le ayudan a destacar. ¿Pero, por dentro tiene lo necesario para seguir capturando esa esencia?

Un interior llamativo y bien equipado, pero que podría capturar mejor la esencia de Audi

En este segmento subcompacto premium navegan prácticamente solos el A1 y el MINI Cooper. Es común escuchar que coches como estos no pertenecen a dicha clasificación premium; opiniones hay de todas y son validas, pero a mi parecer, sí lleva varios detalles que lo ponen más del lado de la balanza premium. Te explico la razón.

Para empezar la percepción de calidad en general tiene buen nivel. El tablero viene forrado con plástico suave en la zona superior, hay algunos plásticos rígidos texturizados, y el plástico duro liso en la parte frontal viene en las zonas bajas, vaya hasta el tacto de los botones es muy distinto al que tendrías en un SEAT Ibiza, en un Volkswagen Polo, distinto al que verías, no sé, en un SEAT León. Más refinado y sólido al final del día.

Y aunque me haya encantando el diseño y los opcionales contrastantes de color amarillo para acentuar sus formas, donde sí no puedo negar que siento que me quedó a deber es en las puertas, adelante y atrás hay plásticos duros y eso sí creo que siendo un Audi pudo haber estado mejor.

Afortunadamente hay otros detalles que de nuevo empiezan a empujar la balanza más hacia el lado correcto. Para empezar es que de serie y desde el modelo de entrada ya tendremos el cuadro de instrumentos digital y la pantalla táctil de 8” de alta definición compatible con CarPlay y Android Auto.

Ya exclusivo de esta variante Ego —que a mi parecer es la más equilibrada de la gama—, tenemos el aire acondicionado automático de doble zona, asientos con patrón contrastante, iluminación interior LED y sistema de audio Audi que tal vez no es el opcional de Bang & Olufsen, pero que suena muy bien y ya incluye subwoofer.

La parte trasera es de lo que más mejora respecto a la generación anterior, aún con la variante de cinco puertas antes te sentías muy limitado atrás, pero ahora hay un mejor aprovechamiento y puedes viajar más cómodo. Su cajuela es decente tiene capacidad de 335 litros, algo más pequeña que la de sus primos generalistas.

Sí creció y se agradece, pero, el túnel de escape es algo alto quita un poco de espacio en esa zona también para darle un poco más de detalle me hubiera gustado ver un descansabrazos o un puerto USB atrás.

Un auto que da el primer paso a un mejor motor para todo el Grupo Volkswagen

En el apartado de manejo también hay polémica y se entiende que se genera porque comparte plataforma con coches considerablemente más accesibles como el SEAT Ibiza y el Volkswagen Polo, pero, de nuevo, que la comparta no significa que se va a manejar exactamente igual.

Comencemos con el motor, pues esta variante Ego es el primer producto de todo Grupo Volkswagen en traer a México el nuevo motor turbo de 1.5 litros. Audi lo llama 1.5 TFSI, mientras que Volkswagen lo denomina 1.5 TSI Evo. Es una evolución del 1.4 turbo que encontrábamos en el Audi A1 de generación pasada, en algunos Audi A3, en los Volkswagen León, Golf, Jetta, Tiguan, SEAT Ateca, Tarraco... vaya está por todas partes.

Este nuevo motor producirá unas cifras básicamente iguales a las del 1.4 TSI o TFSI, es decir, 150 hp y 184 lb- pie.Este bloque se acoplará a una caja de doble clutch de 7 cambios y lleva el poder al eje delantero nada más en este A1.

Las mejoras de este nuevo motor se hicieron en una búsqueda de ser un poco más eficiente, más suave en su actuar y también en buscar pulir un poco el turbo lag que encontramos generalmente en esos modelos 1.4. La receta funcionó y ese turbo lag ya no se siente tan marcado, a veces aparece, sí, pero ahora responde mejor. Cuando aceleras a fondo tiene un comportamiento muy progresivo, en vez de sentir cómo una patada como en otros autos, sientes más una especie de impulso constante que va escalando a muy buen ritmo.

La caja S-tronic está bien calibrada especialmente para andar en carretera, responde rápido cuando está en modo manual —especialmente rápida en modo Dynamic—, y tiende a ser suave en un uso más relajado. Eso sí, no pierde parte de su naturaleza y a veces en maniobras a baja velocidad le sigue costando identificar si necesita usar la primera o segunda marcha y a veces te da la típica patada cuando por fin decide que hacer.

Otra de sus grandes diferencias con sus primos es que la dirección está mucho mejor calibrada, es considerablemente más precisa y comunicativa, además con el selector de modos de manejo puedes hacerla más suave en modo Efficient o más firme en Dymamic. Hablando del selector de modos de manejo, también tiene un modo Individual que te deja elegir la respuesta del motor y la firmeza de la dirección a tu gusto.

La suspensión también está mejor calibrada, aquí el coche se siente más firme y plantado, vas rápido y transmite más confianza en general. La experiencia de manejo se disfruta mucho, sólo tal vez para elevar más esa sensación premium hubiera trabajado un poco más en la insonorización de la cabina, pues a veces en pavimento maltratado, se cuela el ruido un poco más de lo que me gustaría, fuera de eso créeme que está muy lejos de sentirse como uno de sus primos más accesibles

Con el Audi A1 no hay miedo a equivocarse si quieres tu primer coche premium

El Audi A1 supo capturar la esencia de la marca en un paquete pequeño con todo lo bueno que eso implica y también con todo lo opcional. Lo digo porque mucho del equipo que lo puede hacer aún más especial es justo eso...opcional, me refiero a la cámara de reversa, alerta de punto ciego, freno autónomo, estacionamiento autónomo y mantenimiento de carril.

Entiendo que por los $484,900 que cuesta podrías comprarte de una marca generalista un SUV bien equipado y más amplio, un compacto tope de gama, algún deportivo seminuevo y sí, es cierto, si eso es lo que quieres, adelante hay muchas opciones buenísimas y recomendables. Pero si pensabas en tener tu primer premium o simplemente querías un subcompacto con una mejor experiencia en todo aspecto, entonces créeme que con el Audi A1 Ego, no hay miedo a equivocarse.

Audi A1 EGO 1.5 TFSI

$484,900

• Motor: 1.5 litros turbo
• Potencia: 150 hp @ 5,000 rpm
• Par máximo: 184 lb-pie @ 1,500 rpm
• Transmisión: S-Tronic 7 cambios
• Tracción: Delantera
• Peso: 1,240 kg
• Frenos: Disco/disco
• Velocidad máxima: 222 km/h
• Aceleración 0-100 km/h: 7.7 segundos
• Suspensión delantera: Independiente
• Suspensión trasera: Barra de torsión
• Longitud: 4.029 mm
• Cajuela: 335 litros
• Consumo en ciudad: N.D
• Consumo en carretera: N.D
• Consumo combinado: 16.96 km/l
• Emisiones de CO2: 138.8 gCO2/km
• Capacidad del tanque: 40 litros