Carlos Ghosn, famoso por haber dirigido la alianza Renault-Nissan durante casi dos décadas antes de su arresto, señaló que firmar un acuerdo de asociación entre fabricantes de automóviles es una cosa, pero hacerlo funcionar es otra, haciendo referencia a la alianza reciente que se dio entre Nissan, Mitsubishi y Honda, en una entrevista a Automotive News desde el Líbano, donde vive como prófugo de la justicia japonesa, después de violar la fianza en diciembre de 2019 y huir del país escondido en una caja.
Dicha propuesta de asociación, anunciada en una conferencia de prensa el pasado 1 de agosto en Tokio, unirá a las empresas para trabajar en vehículos eléctricos y definidos por software y en adquisiciones conjuntas. Nissan y Honda comenzaron a delinear los detalles de la idea, indicando que primero investigarán conjuntamente un sistema operativo de software automotriz durante el próximo año y apuntarán a implementar el sistema de próxima generación después del 2027.
Por otro lado, la incorporación de Mitsubishi a la ecuación trae otra voz que podría complicar las negociaciones. De acuerdo con Ghosn, que dirigió la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi como presidente hasta su arresto en el aeropuerto de Tokio en noviembre de 2018, dijo que los nuevos socios enfrentan grandes desafíos. La relación, agregó, parece más una incipiente adquisición de Honda que una verdadera colaboración entre iguales.
Desde que el año pasado reequilibró su alianza con Renault para lograr independencia, Nissan ha parecido una empresa "que intenta encontrar un salvador", dijo Ghosn. "Firmar un acuerdo con Honda parece una iniciativa para intentar desviar la atención de los pésimos resultados".
"No puedo imaginarme ni por un momento cómo va a funcionar la relación entre Honda y Nissan a menos que se trate de una adquisición, a menos que se trate de una adquisición encubierta por parte de Honda de Nissan y Mitsubishi con Honda al mando. Va a ser una adquisición, una adquisición encubierta", dijo Ghosn.
Nissan y Honda no han discutido participaciones cruzadas de capital entre sí, dijeron el CEO de Nissan, Makoto Uchida, y el CEO de Honda, Toshihiro Mibe, en su conferencia de prensa conjunta, pero Mibe añadió que no lo descarta. Los socios están considerando muchas opciones, tal vez incluso crear una nueva empresa, agregó el jefe de Honda.
"Decir que trabajarán juntos es sólo el 5 por ciento del desafío. El 95 por ciento restante de las áreas son aquellas en las que realmente es necesario sentarse, adoptar una posición sólida y repartir el trabajo. Es necesario trabajar en sinergias. Es necesario asegurarse de no obsesionarse con la identidad o la pertenencia nacional. Es necesario analizar realmente el resultado final, aumentar los ingresos y reducir los costos", señaló Ghosn.
Ghosn indicó que la nueva alianza que se está formando podría tener problemas para desarrollar todo su potencial, dada la historia de independencia decidida de Honda, quien nunca ha estado en una alianza de capital significativa con otro fabricante de automóviles, aunque ha tenido vínculos ligeros con General Motors.
