Desde hace unos años en el Reino Unido se votó para salir de la Unión Europea e intentar darle prioridad a todo lo nacional, tener mejor control de sus fronteras y comercio. Esta medida trajo consigo consecuencias que no vieron todos los que estaban a favor de cerrar las puertas del país. En consecuencia muchas marcas extranjeras de todo tipo de industrias están saliendo del país, pues sus negocios se verían afectados por distintos factores una vez que se complete la salida. Una de esas empresas es Honda que ha confirmado el cierre de su única planta en Reino Unido en 2021.
Acorde a la marca, el cierre de la planta de Swindon, de donde han salido más de 3 millones de autos desde su apertura y en la que actualmente se fabrica el Civic HB y Type R para más de 70 países, no fue motivado por el Brexit, sino a una reestructuración necesaria para poder fortalecer su inversión y meta de tener una alineación con autos eléctricos en un futuro no tan lejano.
Sin embargo, acorde a varios expertos como Christian Staddler, profesor en la Escuela de Negocios de Warwick en entrevista para CNN; es probable que la decisión de Honda haya tenido como catalizador el anuncio del Brexit. Pues cuando Honda llegó a Reino Unido lo hizo gracias a las facilidades que los británicos entregaron para que los fabricantes extranjeros entrarán a un nuevo mercado.
Ahora con las posibles consecuencias en el área de importaciones, exportaciones, mercado y demás, el atractivo desde el lado de los negocios y números ya no es tan alto para que una marca elija armar sus autos en el país,
El cierre de la planta de Swindon en Reino Unido afectará a aproximadamente 3,500 trabajadores y proveedores. Honda aclara que la producción de los modelos de esa planta será transferida a varias plantas en Norte América, China y Japón.
El Brexit como amenaza para la industria automotriz
El discurso y consecuencias del Brexit han sido suficiente para que muchas marcas consideren dejar de fabricar autos en Reino Unido, incluso con algunas tomando ya la decisión de hacer cambios en su modelo de negocios para proteger sus intereses.
Nissan y Toyota son algunas de ellas. Nissan ya había anunciado el año pasado que no produciría en su planta de Sunderland, Reino Unido, una nueva variante del X-Trail, poco después también anunciaron el fin de la producción de sus modelos de Infiniti para julio de este año en esa planta debido a la dura competencia de sus rivales, aunque en el caso de Infiniti no mencionaron al Brexit como causa.
Aún teniendo lo anterior en cuenta y si las condiciones siguen siendo desfavorables para los negocios de la marca una vez que se concrete la salida de Reino Unido de la Unión Europea, Nissan podría ser la siguiente en dar un paso atrás.
Toyota por su parte también amenazó con dejar de fabricar autos en 2023 o bien reducir producción e inversión si las condiciones terminan siendo contraproducentes a sus planes. BMW y Ford también se han sumado a la protesta, en el caso de la marca alemana, han aclarado que detendrán la producción en su planta de MINI durante un corto tiempo para evitar la falta de componentes.
El salir de la Unión Europea, implica que Reino Unido ya no se regiría por parte de los acuerdos comerciales de la Unión Europea, mismos que facilitaban la importación y exportación de materiales para la fabricación de todo tipo de objetos, incluyendo autos. Si se llegan a imponer impuestos muy elevados a los envíos de los materiales que las marcas usan para ensamblar sus autos, el costo de los mismos se tendría que elevar para no afectar las ganancias de la empresa, y al elevar los precios bajarían el número de consumidores en general.
