Hoy vas a aprender a revisar que tu auto se encuentre bien pintado
Finalmente sucedió. Cuidaste tu coche al máximo, dejándolo apartado en los estacionamientos públicos para evitar los clásicos “portazos”, eludiendo los estacionamientos públicos con valet parking, pusiste todo de tu parte, pero...tu auto tiene un golpe.
Cuando se trata de un desafortunado accidente no hay de otra, lo mejor es llamar al seguro y dejar que ellos se hagan cargo de mandar tu auto a una agencia o a un taller autorizado para que lo reparen.
Cuando se trata de un golpe menor, probablemente pienses en mandar tu vehículo a un taller de confianza donde lo dejen como nuevo o al menos, lo más parecido a como lo sacaste de la agencia.
Sin embargo, en ambos casos, debes considerar unos puntos muy importantes para verificar que el trabajo fue realizado correctamente.
El color
Las piezas que han sido reparadas deben tener el mismo tono que el resto del auto. Es normal que la pintura se vea un opaca al principio, ya que regularmente el color asienta mejor, una vez que el auto ha sido pulido. Se han dado casos en los cuales el taller o agencia entrega el auto sin este último paso, ojo.
Escurrimientos
Mucho ojo con los escurrimientos. Es raro que a un pintor experimentado le suceda, pero llega a pasar, sobre todo con los talacheros a pie de banqueta.
El tiempo
Muchos detalles de una pintura mal aplicada pueden salir hasta días después, cuando el sol o los factores climatológicos han hecho presa de tu auto, así es que una semana después de haber salido del taller, vuelve a revisar tu auto, centímetro a centímetro.
La clásica “briseada”
Cuando un auto es reparado en un taller que no cuenta con cabina especial, se dan casos en las cuales los coches vecinos son “briseados” con la pistola aplicadora de pintura. Verifica tu auto detalladamente, sin olvidar los cristales.
Imperfecciones
Pasa la mano por las piezas que han sido reparadas. ¿Se sientes tersas o rugosas? Si percibes algo raro puede significar que el lienzo no fue reparado siguiendo la técnica adecuada o bien que se utilizó pasta o algún otro elemento que no fue aplicado adecuadamente.
Que todo ajuste como debe ser
Cuando el daño ha implicado reparar puertas, cajuela o cofre, debes verificar que todos hayan sido colocados de la forma adecuada. Debe existir el mismo espacio entre lámina y lámina, ni más ni menos.
De igual forma, verifica que todo cierre adecuadamente. No deben existir puertas vencidas, ni omisión de empaques.
¡Pero mi auto es nuevo!
Sí, lo sabemos y también debes revisarlo a conciencia antes de manejarlo fuera de la agencia. No porque tenga piezas reparadas (que podría darse el caso), sino para verificar que no existan golpecitos que pueden pasar desapercibidos a simple vista.
A veces sucede que durante el transporte los coches sufren daños que incluso pueden pasar desapercibidos para los mismos operarios.
Si vas a llevar tu coche con el hojalatero de la esquina
Si por alguna razón no quieres mandar tu auto a reparar a la agencia o a un taller autorizado y decides llevarlo con “los mágicos”, “el mago” o cualquier otro hojalatero que trabaje a pie de banqueta debes tomar en cuenta los tips anteriores, y además:
No elijas hojalatero al azar. Trata de llevar tu auto con alguien que te recomienden tus amistades o familiares.
No dejes ni recojas tu coche de noche o muy temprano, cuando haya poca afluencia de autos y de personas.
No dejes objetos de valor en el auto.
Cuando recojas tu auto, revisa que todo esté donde lo dejaste y con ello nos referimos a llanta de refacción, herramienta, gato hidráulico, etc.
No está de más que eches un ojito a las cuatro cinco llantas de tu auto ¿son las mismas que las que salió de agencia? ¿Coincide la marca y dibujo de todas ellas?
Con lo anterior no estamos diciendo que no debes llevar tu auto con los hojalateros a pie de banqueta, ya que entre ellos existen verdaderos maestros de la hojalatería y la pintura, lo único que te pedimos es que tengas precaución.
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