En medio de un mundo que día a día apuesta más por coches híbridos, Lamborghini no se rinde ni siquiera a la utilización de turbo en sus motores. Sus motores naturalmente aspirados se han vuelto todo un ícono de la marca, pero el futuro de la industria es estricto y la firma italiana terminará rindiéndose, tarde o temprano, a las configuraciones híbridas.
El siguiente Lamborghini Huracán, que deberá llegar en 2022, tendrá un corazón híbrido. Así lo ha declarado Stefano Domenicali, CEO de Lamborghini, ante nuestros compañeros de Autocar: "el próximo Huracán necesitará hibridación. La hibridación es la respuesta, no hacerlo completamente eléctrico".
El reto, por supuesto, es enorme. Lamborghini necesitará trabajar mucho a nivel ingeniería para conseguir que las baterías ofrezcan suficiente capacidad para aguantar el uso extendido en circuitos. También es importante mantener bajo el peso. Aunque la inclusión de motores eléctricos sugiere una mejor aceleración, el peso de las baterías puede pasar su factura en el comportamiento general.
El camino por recorrer aún es largo, pero Lamborghini tiene el tiempo y las herramientas necesarias para cumplirlo. Dentro de Grupo Volkswagen, Porsche ha generado mucho conocimiento acerca de deportivos híbridos, e incluso la propia Lamborghini ya tiene listo un vehículo con una fuente de poder así: su SUV, el Urus, será híbrido, aunque no tan orientado a tan altas prestaciones como sucede con el Huracán.