Cuando hablamos de autos eléctricos de rango extendido o bien, híbridos en serie, no recordamos a muchos modelos. Especialmente viene a la mente el Chevrolet Volt, sí con "V", que era un sedán y no el Bolt en forma de MPV-SUV que conocemos ahora. O bien el nuevo Nissan Kicks e-Power. En su camino a la electrificación Mazda ha decidido unirse a ese grupo de marcas y autos que combinan un poco de lo mejor de ambos mundos, dándonos como resultado al Mazda MX-30 e-Skyactibe R-EV, que como generador usa el mítico motor rotativo que tanto hizo famosa a la marca en el pasado.
La magia del motor rotativo
Mazda tomo el principio de Félix Wankel, un ingeniero alemán que con NSU intentó dar vida a un nuevo tipo de motor a combustión, el motor rotativo o Wankel, que en vez de tener cilindros y pistones, se compondría de una cámara y un rotor en forma triangular que giraría sobre un eje y que se encasillaría en un bloque de forma ovalada que le permitiera llevar a cabo varios procesos de combustión de forma simultanea.
Al paso del tiempo, Mazda compró las patentes de Wankel y mejoró algunos detalles para darle vida a varios modelos de su historia como el legendario Cosmo, el mítico 787B que fue el único auto con motor rotativo en ganar las 24 horas de Le Mans, los icónicos RX-7 y RX-8, por ejemplo.
Sus ventajas radicaban en ser motores más ligeros, pequeños, que alcanzaban muchas más revoluciones y un buen nivel de poder. Desafortunadamente aún en nuestra era estos motores no eran perfectos, pues para lubricarse había que inyectar aceite directo a la cámara de combustión, por lo que consumían mucho aceite, no eran tan eficientes, emitían más emisiones contaminantes que un motor común y los sellos de grafito las aristas del rotor tendían a desgastarse rápidamente creando pesadillas mecánicas cuando hasta el más mínimo detalle de mantenimiento era ignorado.
Por esa razón Mazda abandonó su uso tras el RX-8, aunque nunca dejaron de lado la posibilidad de volverlo a emplear. Tras más de una década de refinamiento y avances tecnológicos, la marca japonesa está lista para traerlo de regreso, no como el principal responsable del movimiento de un auto, pero sí como un generador para un batería que alimentará al motor eléctrico.
El MX-30 e-Skyactiv R-EV es un híbrido enchufable en serie, algo como un Kicks e-Power, pero que también puedes enchufar
Para obtener electricidad se puede enchufar a la corriente o bien solo ponerle gasolina al tanque para alimentar al generador.
El principio de un auto híbrido en serie se ha visto fuertemente en México con el reciente lanzamiento del Nissan Kicks e-Power, un vehículo que usa un motor a combustión solo para generar carga para una batería pequeña, misma que dota de poder a un motor eléctrico que es el encargado en un 100% de mover el auto.
En un híbrido en paralelo, como un Toyota Prius, RAV 4 Hybrid, KIA Niro y compañía, tanto el motor a combustión como el eléctrico pueden impulsar al auto, aunque el motor a combustión hará el 70% del trabajo.
En el caso del MX-30 e-Skyactive R-EV tenemos a un híbrido enchufable en serie ya que además de ser capaz de generar carga con su motor rotativo a combustión, también tiene la capacidad de enchufarse a un cargador para llenar la batería, cosa que el Kicks no puede hacer. Este Mazda puede pasar del 20% al 80% de carga en 25 minutos con un cargador de 36 KW. En un cargador para casa de 7.2 kW le tomará 90 minutos llegar a ese mismo nivel.
La lógica de Mazda tras este auto es que la mayoría de las personas que tienen un auto, a diario no recorren más de 50 km, por lo que tener una batería gigantesca no es un buen modelo ya que implica mayores precios de venta, más peso en el auto y más contaminación en su proceso de fabricación. Por ello creen que una batería pequeña es suficiente para el día a día, pero cuando queramos hacer un viaje largo, el motor a combustión será como tener un cargador a bordo del auto. Eliminando la necesidad de planificar los puntos de carga de electricidad en favor de solo poner un poco más de gasolina al auto para seguir nuestro camino.
Dejando esto en claro, Mazda a elegido darle un motor eléctrico capaz de producir 170 hp, puede hacer el 0-100 km/h en 9.1 segundos y tiene una velocidad máxima limitada a 140 km/h, que sinceramente son más que suficiente para un viaje en carretera. El peso en total del auto, aún con una batería de 17.8 kWh y su motor rotativo como generador de 830 cc, es de solo 1,778 kg. Es decir, solo 113 kg más que un MX-30 totalmente eléctrico con batería de 35.5 kWh.
Mazda dice que en modo totalmente eléctrico puede dar hasta 80 km de autonomía en carretera, mientras que en ciudad con una buena técnica de manejo, puede llegar hasta los 115 km por carga. Hasta ahora no han revelado su consumo homologado, sin embargo, se espera que vaya por encima de los 25 km/l en modo híbrido.
Mazda habla de una nueva generación de motores rotativos que no tendrán las desventajas que explicamos antes, por el contrario llevan un sistema de inyección directa y hasta recirculación de gases de escape para producir menos emisiones, menores temperaturas y más eficiencia.
Mismo diseño que un MX-30 eléctrico
El MX-30 e-Skyactiv R-EV luce exactamente igual a cualquier otro MX-30, cuenta con las mismas puertas de apertura opuesta, un interior minimalista, luces y calaveras LED, y todo el equipo que podríamos esperar de un auto de nuestra era. La única diferencia notoria son los nuevos emblemas en los costados y el diseño de rines que portará.
Por ahora ya está a la venta en Europa, donde en países como España tendrá un valor desde los 38,050 euros, es decir, unos $778,000 pesos mexicanos en un ejercicio de conversión simple. Hasta ahora Mazda no ha contado nada sobre vender este modelo fuera de Europa y Japón.