El Mitsubishi ASX es el SUV más pequeño de la amplia ofertas de camionetas de la firma japonesa. Ha pasado una década desde su lanzamiento original, y aunque el estreno de una nueva generación empieza a sonar razonable, Mitsubishi decide conservar el modelo actual con una profunda actualización estética para dejarla a tono con el resto de la gama.
El Mitsubishi ASX 2020 se adapta al lenguaje de diseño Dynamic Shield, protagonizado por faros afilados y una fascia con decoraciones en forma de X. Su rostro queda muy cerca del trabajo visto en otros productos de la marca, como Outlander, Eclipse Cross y L200. La parte trasera conserva los rasgos que le han acompañado desde 2009, con sus debidos retoques en la iluminación LED de las calaveras y el diseño del parachoques.
En la cabina no vamos a encontrar novedades importantes, al menos no en términos estéticos. El modelo 2020 únicamente recibe una dotación extra de equipamiento y la posibilidad de incluir un sistema de infotenimiento más completo. Su pantalla táctil crece a 8 pulgadas —antes era de 7"– y, en las versiones más equipadas, incluye navegación TomTom con información de tráfico en tiempo cuando se conecta un smartphone.
Mitsubishi no ha hablado respecto a novedades mecánicas en el ASX 2020, por lo que suena pertinente imaginar que conserva su configuración mecánica anterior, es decir, un motor atmosférico de 2.0 litros de 148 hp y 145 lb-pie para la mayoría de las versiones, y un bloque de 2.4 litros de 168 hp y 167 lb-pie para el tope de gama. En todos los casos hay una transmisión automática CVT y opción a tracción integral.
A lo largo de sus 10 años en el mercado, el Mitsubishi ASX ha logrado vender 1.32 millones de unidades en 90 países. En algunas regiones es conocido como RVR o Outlander Sport. Durante algunos años fue comercializado en México y es probable que, con esta actualización y bajo la nueva era de la marca, el ASX vuelva a nuestro mercado para competir contra Suzuki Vitara, Mazda CX-3, Hyundai Creta, entre otros.