Concebido como un concepto para rendir homenaje al histórico del Rally Safari de África, el 240Z, Nissan ha decidido materializar al Juke Hybrid Rally Tribute, tal cual cómo lo conocimos y con todas las capacidades que debe tener un vehículo de está categoría, te contamos.
Este one-off, utiliza la misma mecánica de la versión normal de producción del Nissan Juke Hybrid, es decir; un bloque de cuatro cilindros y 1.6 litros, aspirado naturalmente, que produce 145 hp totales, ya con el extra de potencia del propulsor eléctrico de 36 kW y su batería de 1.2 kWh.
Cómo todo buen vehículo de rally, luce mayor altura respecto al suelo, gracias a un esquema de suspensión reforzado, pasos de rueda ensanchados, neumáticos todoterreno, protectores laterales, frontales y traseros, para las partes bajas, además de un par de neumáticos extra en caso de pinchadura. Era de esperarse que tanto el dorsal con el número 11 y los patrocinadores de la época, estuvieran presentes para complementar el homenaje, al ganador de 1971.
Al interior se aprecia, una jaula antivuelco para lograr mayor rigidez estructural, cinturones de cuatro puntos, asientos delanteros que conservan el audio Bose en cabeceras, mientras que la banca trasera fue desechada para obtener así menor peso en la báscula. El volante forrado en alcántara, con línea al centro en color rojo, freno de mano hidráulico y un extintor, forman parte del interior racing.
Por supuesto, no hay planes de realizar una producción en serie de este modelo, por lo que solo se limitará a la exhibición y muy probablemente terminar en la colección de la propia marca japonesa.