El nuevo Porsche 911 podrá ser prácticamente igual al de generación pasada en el apartado visual. Sólo un par de detalles lo delatan, sin embargo, ha mejorado mucho y ahora es un producto mucho más tecnológico. Por ello la misma marca decide mostrarnos cómo funciona su producto más reciente.
El trabajo de aerodinámica comienza desde el frente con unas nuevas tomas de aire que pueden abrirse o cerrarse acorde a las exigencias de nuestra conducción. Si viajamos a menos de 70 km/h se mantendrán abiertas, sin embargo, al pasar de los 70 km/h, se cerrarán para disminuir el arrastre, sólo se se abrirán si el auto lo pide para bajar su temperatura.
A los 90 km/h se alza el alerón en la posición ECO para continuar rediciendo el arrastre. Al llegar y pasar de los 170 km/h las tomas de aire se abren y el alerón entra en una nueva posición que permite mayor carga aerodinámica en el eje trasero, de igual forma de contar con la suspensión adaptativa, el auto puede bajar en 10 mm para mejorar la conducción y aerodinámica.
En el modo de conducción sobre piso mojado, WET, el alerón también se abrirá un poco sin importar la velocidad para ofrecer mejor agarre en todo momento. Finalmente, si a más de 170 km/h hay un frenado fuerte, el auto desplegará el alerón en su posición más alta para que actúe como freno de aire.