Volvo es una de las marcas premium más comprometidas con la electrificación. Su gama actual está compuesta completamente por vehículos híbridos enchufables, y su objetivo es pronto dejar de vender motores de combustión interna. Para lograrlo, el Volvo Recharge Concept comienza a trazar el camino.
La generación actual de vehículos eléctricos de Volvo comparte plataforma con modelos de combustión interna, por lo que la arquitectura del auto debe tener proporciones clásicas. El Recharge Concept representa una plataforma 100% enfocada a vehículos eléctricos, con las ventajas que eso implica: una cabina más espaciosa, mayor distancia entre ejes y un diseño minimalista.
La filosofía "less but better" (menos, pero mejor) de la firma sueca se representa en un diseño que conserva elementos clásicos de Volvo, como la firma de LED, pero elimina aquello que ya no se necesita, como las tomas de aire. El resultado es un vehículo de aspecto moderno y mucho más aerodinámico.
Gracias a esta nueva plataforma, la marca puede permitirse realizar cambios importantes al interior, como bajar la posición de los asientos e introducir una nueva generación de infotenimiento. La marca habla de una pantalla de 15" con servicios en línea y experiencia de usuario mejorada.
Pensado como vehículo del futuro, el Recharge Concept también persigue la ambición de Volvo en cuanto a seguridad. Su protagonista será un sensor LiDAR —creado por Luminar— para garantizar la seguridad de la conducción autónoma en el futuro. El sensor va colocado en una posición estratégica para recoger información alrededor del vehículo.
El Recharge Concept es, por el momento, un prototipo, pero también es una declaración de intenciones de hacia dónde se dirige el futuro de la marca y cómo será el Volvo XC90 de siguiente generación, sin propulsión a combustión interna.