AMG nació a finales de los años 60 como un simple taller que quería revivir las glorias de Mercedes-Benz en las pistas después de su retiro del mundo de la competición por algunas trágicas razones. Pasaron los años y su popularidad y calidad crecieron tanto que se volvieron parte de Mercedes y Daimler. Hace poco desarrollaron desde cero su primer auto, el SLS, seguido del AMG-GT y ahora estarán a cargo de traer al nuevo Mercedes-Benz SL.
La razón es más que obvia, Mercedes quiere que el SL sea un modelo más deportivo y visceral, por ello usarán una nueva plataforma pensada completamente en el alto rendimiento en lugar de una más cómoda como acostumbra Mercedes.
De acuerdo a una fuente de AMG, este proyecto estará muy lejos del SL que conocemos ahora. Se habla de más ligereza y poder bruto. Incluso, hablando de peso, podría perder su techo rígido para añadir uno de lona y ahorrar varios kilos al final del día.
La plataforma usada será la MSA, una variación más ligera de la MRA del Clase C actual, que gracias a la incorporación de fibra de carbono, aluminio y plásticos de alta resistencia. Aún no hay fecha de presentación, pero no cabe duda que el próximo SL será una bestia sin techo.
Vía | Autocar
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