Chevrolet Tracker RS, a prueba: un nuevo toque de diseño para convencer a los indecisos
En el segmento más reñido del país, concretar las ventas sorpresivamente no solo depende de que tanto equipo por determinado precio se ofrezca. El diseño también es esencial y por ello muchas marcas echan mano de sus líneas de corte deportivo para lograrlo. Chevrolet para nada es ajena a ello y esa es la razón por la que impulsan aún más a su Tracker al darle una nueva variante llamada Chevrolet Tracker RS.
En video
Chevrolet Tracker RS 2024
$519,900
- Motor: 3 cilindros turbo de 1.2 litros
- Potencia: 130 hp @ 5,500 rpm
- Par: 140 lb-pie @ 2,000 rpm
- Transmisión: Automática de 6 velocidades
- Tracción: Delantera
- Frenos: Disco/Tambor
- Peso: N.D
- Suspensión delantera: Independiente
- Suspensión trasera: Eje rigido
- Longitud: 4,270 mm
- Cajuela: 681 litros
- Consumo en ciudad: 15,8 km/l (cifra de la marca)
- Capacidad del tanque: 44 litros
- Fabricado en:: Brasil
Hay de todos los colores, combinaciones, tamaño y filosofías. Justo en un mar de ese tamaño hay que hacer lo necesario para destacar. Chevrolet uso la ruta RS, es decir, esos cambios discretos, pero notorios que le añaden un look con tonos deportivos a varios de sus autos.
En el caso particular de este Tracker, veremos una parrilla completamente oscurecida, rines de 17”, carcasas de espejos, detalles de defensa y emblemas de Chevrolet en color negro, además del emblema RS. Antes de seguir dejemos bien en claro que este tratamiento es solo estético, pues mecánicamente no hay mejoras.
Este Tracker se coloca solo por debajo de la variante Premier —la tope de gama—, por lo que el equipo es muy parecido, teniendo faros y calaveras LED, techo panorámico, y los rines de 17” de los que ya hablamos.
Tras tres años de conocerlo, el Tracker sigue manteniendo lo necesario para verse vigente, aunque el frente creo que empieza a distanciarse de los modelos más nuevos de la marca. Con 4.2 metros de largo, el Tracker RS y en general, toda la gama de Tracker se coloca como uno de los B-SUV más grandes del segmento.
Interior con ligeros retoques
Por dentro la historia sigue siendo la misma. Tenemos un diseño algo sobrio, mezcla de materiales firmes cómo elementos dominantes y algunos insertos suaves para mejorar la percepción. Esta variante RS tendrá algunos contrastes de color rojo en los asientos y tablero para resaltar un poco más.
Referente a equipo, al estar debajo de una versión Premier son muy pocas cosas las que pierde, de hecho, lo que no lleva es: Pantalla a color en el cuadro de instrumentos, a/c automático, limpiaparabrisas automático, espejo electrocrómico, monitor de punto ciego y sistema de estacionamiento autónomo.
En cuanto a lo que sí lleva nos encontramos con: la pantalla central de 8” compatible con Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos, cargador inalámbrico para celular, a/c manual, OnStar con conectividad Wi-Fi, asistencia en el camino y muchas otras funciones. Continuamos con cuadro de instrumentos análogo, volante multifuncional, espejo retrovisor manual, asientos en piel sintética de ajuste manual y muy buen espacio de almacenamiento.
A nivel conectividad es de los mejores, tanto por interfaz, como por las capacidades de OnStar, tal vez en Tracker ya me gustaría ver un freno de estacionamiento eléctrico, ajuste eléctrico para asientos y probablemente un cuadro de instrumentos mejor trabajado, nada esencial, pero suficiente para hacerlo sentir más fresco.
En términos de espacio aprovecha muy bien su silueta de SUV tradicional al dar un buen nivel de espacio en la zona trasera para personas de hasta unos 1.80 metros. Además la cajuela puede tener capacidad de hasta 681 litros si contamos de techo a suelo. Ya con la cubierta de privacidad, rondaremos los 420 litros de capacidad.
En cuanto a seguridad de nuevo está muy bien configurado, pues de base ya lleva 6 bolsas de aire, frenos ABS, control electrónico de estabilidad, asistente de ascenso en pendiente, freno autónomo de emergencia, control de velocidad crucero, cámara de reversa y sensores de proximidad.
Ese equipo está muy bien, sin embargo, al ver a sus rivales que cada vez suman más cosas, creo que ya es tiempo de ver un mantenimiento de carril y que también se sume el monitor de punto ciego, del modelo más completo.
8.4
A favor
- Buen aprovechamiento de espacio
- De la mejor conectividad del segmento
- Puede ser eficiente al tener buena técnica de manejo
En contra
- Los acabados podrían mejorar
- Ya es hora de agregar más asistencias de serie
Lo RS solo modifica el apartado estético, el desempeño sigue igual
Al volante del Chevrolet Tracker RS 2023, recordamos unas sensaciones que como siempre en este grupo priorizan la** comodidad**. Afortunadamente, gracias al motor turbo, podemos sentirnos más capaces de hacer rebases e incorporaciones sin sufrir tanto, solo debemos medir un poco la presencia del turbo lag. No tan exagerado como el de los motores de Volkswagen, pero si notorio.
Su motor turbo es de 3 cilindros de 1.2 litros y produce un total de 130 hp y 140 lb-pie de par, acoplado a una caja automática de 6 velocidades que lleva todo el poder al eje delantero.
En cuanto a manejo, la dirección es muy suave, al estilo estadounidense donde todo es muy fácil de llevar, pero no muy rápida o precisa. La suspensión sigue la misma ruta, con unos resortes que hacen que incline un poco más que un Peugeot 2008, por ejemplo. Algo más a la par de lo que sentirías con un KIA Seltos.
A pesar de ser un SUV de poco más de 1,200 kg de peso, los frenos nunca llegaron a sentirse fatigados ni en ciudad ni carretera, a pesar de llevar tambores en el eje trasero. En general una experiencia neutra y cómoda para quien busque justo eso, comodidad como prioridad.
En términos de consumo, lo mejor que marcamos fueron 12.9 km/l con ciudad completamente vacía, y hasta unos 8.8 km/l con tráfico pesado.
Una camioneta muy neutra, con todo lo bueno y a mejorar que eso implica
El Chevrolet Tracker sigue siendo un modelo convincente, especialmente por espacio, comodidad, eficiencia y conectividad. A mejorar recalco que me gustaría ver más asistencias incluidas en los modelos más caros, pero aún sin ellas, sigue siendo un modelo muy recomendable.
A grandes rasgos no hay muchas cosas en las que sea referente, salvo por la conectividad, ya que una red tan bien desarrollada como la de OnStar aún no es desplegada por ninguna otra marca rival. Sin embargo, tampoco tiene cosas que se hayan ejecutado mal cómo para reprochárselo. Simplemente es una camioneta neutra y balanceada.