¡Oh, los subcompactos con cajuela! Sedanes que año con año dominan las ventas de nuestro país, que por su relación tamaño/equipamiento/consumo se han vuelto de los favoritos del consumidor mexicano pues funcionan tanto como vehículo personal, como familiar. En la primera parte del artículo Salvador nos cuenta la razón por la que comparamos estos tres modelos; ahora es momento de entrar en detalles con el primero: el Honda City.
En México está disponible en tres versiones, con precios que parten de $219,000. Nuestra unidad de pruebas era la más costosa de la gama, el Honda City EX con transmisión CVT, cuyo precio es de $251,900, el más costoso de la comparativa, y de los más caros de su segmento. ¿Cómo se comporta este sedán hecho en Tailandia de frente a sus rivales? ¡Vamos con ello!
Un 'baby-Civic'
En 2014, el Honda City recibió una actualización muy profunda; uno de sus principales cambios fue el diseño, que ahora lo hace más atractivo y deja de parecer un pequeño sedán inocente en la jungla de asfalto. Sus trazos apuntan hacia lo agresivo gracias a lo anguloso de sus faros. A primera vista, lo que más resalta es esa incesante impaciencia por compararlo con su hermano mayor, el Honda Civic.
A decir verdad, el Honda City es estéticamente eso, un Civic chiquito. Cada quien tiene sus gustos, y no podemos catalogarlo como el más bonito o feo del segmento; lo cierto es que Honda prestó atención a los detalles insertando cromo y asemejándolo a su súperventas de décadas, pero sin perder la apariencia de auto japonés de diseño genérico, aunque con aires de ostentoso.
El habitáculo le dice hola a la era digital
El interior es bastante atractivo, de hecho es el mejor logrado de los tres modelos comparados. El cuadro de instrumentos muestra los relojes rodeados por halos azul eléctrico que ayudan a incrementar la sensación de calidad a bordo del Honda City. Se complementa con un volante que ya incluye los indispensables controles de audio y de velocidad crucero, pero destaca que lleva paletas de cambio. Un City hecho a lo F1.
Pero lo más interesante de la cabina no está ni en los halos ni en las paletas de cambio, sino en el tablero que es completamente táctil; incluye una pantalla de 7" que despliega la información de la computadora de viaje —con posibilidad de guardar hasta 3 trayectos—, sincronización con smartphones, ajustes del vehículo y todo para controlar el equipo de sonido.
Abajo de la pantalla se encuentra el panel táctil del aire acondicionado, con las mismas funciones que los botones y perillas de otros autos, pero al alcance de un simple y suave toque. Es innovador y sorprendente, sí, sin embargo resta la sensación a la que todos estamos acostumbrados y dificulta el poder identificar las funciones con los dedos, obligándonos a mover la vista hacia la consola para todas las acciones que deseemos realizar
Los asientos, que a diferencia del Nissan Versa no van forrados en piel, resultan cómodos. Los ocupantes de la banca trasera tienen a su disposición sus propias salidas de aire acondicionado y un puerto de 12V adicional. La cajuela es la más pequeña de los tres, pero los asientos traseros se pueden abatir totalmente ofreciendo mayor espacio.
A la vista, el interior es el mejor de los tres sedanes que comparamos. Su sensación de calidad y armado superan a la del Versa y Ciaz. En contraparte, el equipamiento es un punto flojo, pues por lo que cuesta creemos que podría llevar elementos como cámara (o sensores) de reversa y encendido por botón. Ya que comparte plataforma con el Honda Fit, da la sensación de ser un auto más espacioso de lo que parece.
Un sedán urbano que destaca en carretera
El más vivo
Aunque la transmisión CVT del Honda City está lejos de ser divertida, las paletas de cambio permiten jugar más con el auto que las cajas automáticas de Versa y Ciaz.El Honda City con un motor de 4 cilindros de 1.5 litros, entrega 118 hp y 107 lb-pie de torque. Nuestra unidad de pruebas llevaba una transmisión automática tipo CVT, aunque en otras versiones está disponible con una manual de 5 velocidades.
El andar del Honda City es muy suave y los "cambios de marcha" son apenas perceptibles. A diferenciadel Ciaz, cuando se le pide acelerar el Honda City lo hace sin dudarlo demasiado, y manejarlo en modo 'S' permite exprimir mejorel poder del motor, algo que no hacen las cajas ni de Ciaz ni de Versa; la del Ciaz no parece reaccionar en muchas ocasiones, y el Versa subía mucho de revoluciones, pero no despegaba como uno imaginaría.
Cabe mencionar que el Honda City tiene el motor más potente de los tres, pero también el que más combustible gasta; arrojó un consumo de 10 km/l en ciudad y 14.5 en carretera. En materia de frenado, los ABS actúan de forma oportuna, pero la sensación de desaceleración no es tan buena como en el Nissan Versa. Aún así, Honda City frena mucho mejor que el Suzuki Ciaz, cuyo sistema de frenos ABS tarda en intervenir.
Apagamos motor, compramos un café y nos ponemos a pensar...
Tomando en cuenta el precio del Honda City —$251,900— y la diferencia que hay respecto al Ciaz y al Versa, es lógico que entre la duda de si el precio lo vale. El sedán de Honda carece de cámara de reversa, encendido por botón, sistema de navegación y entrada auxiliar —que sí encontramos en Versa—; y no resulta tan espacioso ni tan ahorrador como el Suzuki Ciaz, pero el City lo compensa con mejores resultados en pruebas de choque, un desempeño dinámico más vivo y una grata sensación de calidad al interior.
Fotografía | Gerardo García | Mauricio Juárez
