Jeep Grand Cherokee Trackhawk, a prueba: 707 memorables, emocionantes y ruidosos caballos
De vez en cuando todos deberíamos parar lo que estamos haciendo y dar un grito fuerte que provenga desde lo más profundo de nuestro cuerpo, para liberar energía acumulada y mejorar el estado mental. Dicen que la capacidad de asombro se va perdiendo con la edad... entonces llega Jeep y me dan a prueba el SUV más potente del mundo, repito: DEL MUNDO. Y como parte de mi cerebro sigue teniendo 14 años, este fue el resultado.
A la marca Jeep la conocemos bien, su origen en 1941, la utilidad de sus vehículos, la evolución del Willys y su capacidad todoterreno, etcétera. En fin, Jeep tiene un estilo propio que ha permeado hacia otros segmentos, pero créanme cuando les digo, que esta vez, Grand Cherokee Trackhawk y yo, los vamos a dejar como emoji de sorpresa.
Ballena blanca
Por cada segundo que presioné el acelerador a fondo, el resultado fueron diez segundos de risas incontrolables, entre nerviosas y de emoción. En los años que he probado autos, he tenido el privilegio de llevar al límite varias bestias de la aceleración. Sin embargo, este fue mi primer SUV de más de 700 hp.
Del manejo al límite de Grand Cherokee Trackhawk sólo recuerdo el sonido y la velocidad. Lo cual es un halago, ya que lo mismo recuerdo de haber manejado Porsches, BMWs y algunos otros superautos. Sin embargo, este Jeep es una locura, y eso también fue un halago.
El motor de Trackhawk es ensamblado en Saltillo, México.
El desempeño superó todas mis expectativas, con todo y sus casi 2.5 toneladas de peso y todo el espacio interior de un SUV familiar de lujo, el Trackhawk es especial. Es más rápido que un Challenger Hellcat de 0 a 100 km/h, se maneja mejor que el coupé de Dodge, y es tan rápido en el cuarto de milla como un Tesla Model X P100D.
Jeep Grand Cherokee Trackhawk es un estuche de monerías técnicas. El motor HEMI supercargado está reforzado y cubierto de aleaciones muy especiales que soportan el calor y la fricción que causan 707 hp y 645 lb-pie de par. Los amortiguadores son Bilstein, frenos Brembo con discos ventilados y barrenados, y cálipers de 6 y 4 pistones, y la tracción integral que está programada para enviar hasta el 70% de la potencia al eje trasero.
La importancia de transmitir la potencia al piso
En el cofre encontramos dos grandes salidas de aire para extraer el calor que produce el motor.
Lo que coloca a Jeep Grand Cherokee Trackhawk al frente de sus compatriotas más poderosos, familiares o no, es que con los rodillos, perdón, llantas de 295 mm de ancho, pegajosas como mastique, la correcta programación de la caja, y que con el Launch Control cada despegue es perfecto, alcanza los primeros 100 km/ en menos de 4 segundos, y se puede acelerar para salir de las curvas sin perder la trayectoria.
Se mueve en el territorio de Porsche Cayenne Turbo S, Lamborghini Urus, el ya mencionado Tesla Model X, BMW X5M, GLE 63 AMG y Bentley Bentayga, pero ojo, ninguno de estos SUV de marca se acercan a los 700 hp, el Jeep es el único que los supera. Y ahí está la "magia", con brutal potencia, peso de cetáceo, dirección de... bueno, SUV, y de corte familiar, Trackhawk es capaz de andar al tú por tú con superautos, gran turismos, y muchos otros deportivos en cualquier situación.
Para toda la familia
Aunque su naturaleza bestial hace del Grand Cherokee Trackhawk un vehículo puramente emocional, no debemos olvidar que es un SUV familiar de lujo, y en mi opinión, el mejor producto de la marca Jeep. Sí, lo dije, fanáticos del Wrangler, los leo.
La suspensión es firme y el consumo ridículamente alto, sin embargo, a 40 km/h es un lujoso y muy bien equipado conmutador familiar. La cajuela supera los 1,000 litros de capacidad, el espacio en las plazas traseras es más que suficiente, y la naturaleza deportiva de los asientos, vestiduras, detalles, costuras, emblemas e insertos de fibra de carbono, lo colocan al nivel del Grand Cherokee más equipado (Summit Elite Platinum 4x4 $1,199,900) con más atención al detalle y una transmisión de alto desempeño en lugar de 4x4.
Diagnóstico en tiempo real
Las Performance Pages son justo eso. En la pantalla central de 8.4 pulgadas con sistema UConnect, se despliega la información de Fuerzas G, cuenta con dinamómetro (potencia y par) en tiempo real, tiempo de reacción y aceleración (a 100 y 160 km/h) y frenado (100 a 0 km/h), de cuarto de milla, temperatura y presión de fluidos y transmisión, y hasta la presión de soplado del supercargador.
Quienes compran Trackhawk por ser fanáticos del poder y la velocidad, estarán felices haciendo sus propios análisis y mejorando sus tiempos de vuelta en pista. Quien lo hizo porque es un Grand Cherokee, puede disfrutar de un montón de funciones más de análisis de consumo, cuentakilómetros, tiempo transcurrido, o simplemente activar el modo ECO, que reduce el ruido y la respuesta del acelerador considerablemente y disfrutar del potente sistema de sonido Harman Kardon.
Los modos de manejo permiten que las distintas personalidades de Grand Cherokee Trackhawk sean desatadas. Desde Eco hasta Track —donde se puede modificar hasta las rpm para arrancar—, que desactiva parcialmente las asistencias, podemos manejar distintos vehículos con el mismo volante.
También la seguridad
Es uno de los vehículos de FCA mejor equipados con asistencias de seguridad activa y pasiva. Más allá de controles de tracción y estabilidad, Grand Cherokee Trackhawk ofrece —de serie— alerta de colisión con freno de emergencia, monitor de punto ciego, asistencia de mantenimiento de carril y alerta de abandono del mismo, cámara de 360° con asistencia de estacionamiento y control de crucero con función de seguimiento a cualquier velocidad, y bolsas de aire frontales, de rodilla y de cortina para ambas filas.
Admiro a los ingenieros que diseñaron este monstruo, a quienes decidieron llevarlo a la producción, y a quienes afinaron los detalles para que el resultado fuera tan impresionante.
Estoy consciente que no es el vehículo más rápido para la pista, ni el más eficiente para la vida diaria, sin embargo, me quedo con un recuerdo muy especial para Grand Cherokee Trackhawk, su relevancia en el agonizante mercado de los V8 y muscle-cars, y sólo porque es el juguete más especial que he manejado este año, le cedo un lugar en mi cochera ideal, que había estado muy silenciosa.
8.0
A favor
- 707 hp. ¿Necesito decir más?
- Jeep es especialista en sistemas de tracción en las 4 ruedas, el trabajo que hicieron con esta configuración deportiva es excelso.
- La sinfonía que crean el ronco escape y el aullido del supercargador.
En contra
- No hay manera de que consuma poca gasolina. La verdad, no importa.
- El díametro del volante es muy grande para maniobras rápidas.
- Que no se haya quedado en mi cochera permanentemente.
Jeep Grand Cherokee Trackhawk
$1,949,900
- Motor: V8 HEMI, 6.2 litros supercargado
- Potencia máxima: 707 hp @ 6,000 rpm
- Par máximo: 645 lb-pie @ 4,800 rpm
- Transmisión: Automática de 8 velocidades
- Tracción: Integral permanente
- Frenos: Discos ventilados y barrenados
- Peso: 2,433 kg
- Velocidad máxima: 290 km/h
- Aceleración de 0 a 100 km/h: 3.9 segundos
- Suspensión delantera: Muiltibrazo de aluminio
- Suspensión trasera: Muiltibrazo de aluminio
- Longitud: 4,822 mm
- Cajuela: 1,028 litros
- Consumo en ciudad: 4.7 km/l
- Consumo en carretera: 7.2 km/l
- Consumo mixto: 5.5 km/l
- Emisiones de CO2: N.D.
- Capacidad del tanque: 93 litros