Probamos el KIA Rio Sedan, ¿de verdad es la octava maravilla?

A estas alturas, seguramente ya has escuchado decir que el KIA Rio es la octava maravilla y que no hay cosa mejor en el segmento de los subcompactos. ¿Es tan bueno como todos cuentan? La respuesta corta es sí, porque convertirse en la mejor opción de su categoría en México resultó demasiado sencillo, únicamente hacía falta ofrecer lo que sus rivales no.

Su competencia ha dejado tantos huecos, que con sólo ofrecer un nivel de seguridad a la altura de los estándares internacionales, el KIA Rio ha sido capaz de convertirse, casi en automático, en la mejor compra de su segmento. Su nueva generación ya fue presentada y llegará a México antes de lo que imaginas. Mientras tanto, analizamos bajo la lupa al KIA Rio actual que, pese a su talento, aún tiene cierto rango de mejora.

Discreto y funcional, el KIA Rio es un sedán poco pretencioso

Lo que ves es lo que hay. No se trata de un sedán de aspiraciones deportivas ni que busque romper esquemas de diseño, simplemente es un auto relativamente espacioso, con buena cajuela y, ante todo, muy cómodo; es como deberían ser todos los sedanes, en teoría.

Mide 4.37 metros, con lo que se coloca justo en la media del segmento de los sedanes subcompactos, pero apenas encima del promedio en materia de espacio. Es capaz de acomodar a cinco adultos, pero cuatro viajarán mucho más cómodos. La cajuela es amplia, pero no cuenta con botón para abrirla desde el exterior; únicamente desde la llave o jalando la palanca en el interior del vehículo.

Desde dentro, el KIA Rio es simple y funcional, pero ante todo, bien equipado. Desde el modelo de entrada, tenemos aire acondicionado, equipo de sonido con puerto USB y entrada auxiliar, conexión Bluetooth, controles de audio al volante, vidrios delanteros eléctricos, control de velocidad crucero y computadora de viaje. La versión que probamos, EX, suma vidrios traseros eléctricos, sensores y cámara de reversa, llave inteligente, acceso keyless, espejos plegables eléctricamente, cuadro de instrumentos "supervisión", pantalla táctil de 7 pulgadas —sería genial que fuera compatible con CarPlay y Android Auto— y rines de aluminio de 15 pulgadas. Por 233,900 pesos, ¿quién da más?

La calidad general también nos dejó un buen sabor de boca. Los acabados, como cualquier otro subcompacto, son bastante sencillos, pero combina correctamente los plásticos del tablero y de las puertas para ofrecer una grata sensación de calidad. Además, a pesar de que circulamos en calles mal pavimentadas, no detectamos ruidos que acusen un mal trabajo de ensambles por parte de la fábrica de KIA en Corea del Sur.

Con 138 hp, debería ser bastante divertido, ¿no? ...no

A la hora de echarlo a andar, encontramos su mayor virtud o el peor de sus defectos, según el criterio de quien lo maneje. El conductor promedio, que busca un auto cómodo para ir de A a B, encontrará que el KIA Rio es de los sedanes que ofrece mayor confort en trayectos urbanos y autopistas, sin embargo, aquel que busque algo de sabor en la conducción, se quedará con ganas de más.

La suspensión y la dirección del KIA Rio son sumamente suaves, lo que resulta ideal en el día a día, pero poco efectivo cuando se circula rápido o en zona de curvas. No quiere decir que sea un modelo inestable, de hecho se percibe bien parado sobre el asfalto y respaldado por asistencias como el control de estabilidad, pero al entrar a curvas, la inclinación de la carrocería y el exceso de asistencia de la dirección nos recuerdan que su target son las familias, no los conductores entusiastas.

Ahora bien, hablemos de lo que hay bajo el cofre. Los 138 hp y 123 lb-pie que promete el motor de 1.6 litros se ven mucho mejor sobre el papel que sobre el asfalto. En la práctica, el KIA Rio sí se percibe ligeramente más rápido que su competencia, pero no parece un subcompacto de casi 140 hp. Hay que manejarlo a altas revoluciones —por encima de las 4,500 rpm— para sentirlo; a bajas revoluciones nos atreveríamos a decir, incluso, que le falta algo de empuje.

De momento, únicamente está disponible con transmisión manual. Con ella conseguimos un rendimiento de combustible de 10.5 km/l, que no está mal, pero hay subcompactos que se mueven prácticamente igual y consiguen un rendimiento superior. Más adelante —quizá en enero— llegue una versión con transmisión automática de seis velocidades.

Seguro, cómodo, confiable y muy bien equipado, el KIA Rio es un buen partido

Quizá no sea el más divertido de manejar y su diseño no sea el más atractivo —a este precio, ¿qué sedán lo es?—, pero con la cabeza fría, el KIA Rio es la mejor opción del segmento. Por poco más de 230,000 pesos tenemos un sedán sumamente cómodo, práctico, seguro y respaldado por los siete años de garantía que ofrece la marca. Frente a modelos como el Nissan Versa, el Volkswagen Vento o el Chevrolet Sonic, le queda poco por envidiar.

¿Qué nos gustaría? Un manejo más divertido —no hay que sacrificar confort para lograrlo— y versiones más equipadas, que integren, quizá, quemacocos, sistema de navegación y clima automático, pero eso es mero capricho. KIA, toma nota para la próxima generación... porque además de racional, queremos un Rio pasional.

Ficha técnica del KIA Rio Sedan

' Cifras oficiales del fabricante

Fotografía | Mauricio Juárez y archivo