KIA Seltos SX, a prueba: casi el más equipado de la gama, pero con motor pequeño

El KIA Seltos logró lo que ningún otro SUV o crossover ha logrado en México. En menos de un año de ventas logró colocarse como el más vendido de todo el país. Dejando muy de lado el esfuerzo de algunos titanes japoneses que tardaron varios en llegar a las primeras posiciones. Por ello, ahora para completar su alineación y captar a cuanto cliente pueda nos presentan al KIA Seltos SX. Acompáñame a ver en donde encaja esta variante dentro de su alineación.

En video

Lo mejor en el exterior para resaltar sin ser un GT Line

Esta versión SX se coloca un escalón debajo de la GT Line, el tope de gama y básicamente se llena de lo mejor en equipo con enfoque a confort, pero sin recibir el motor más potente que sí lleva el GT Line. Básicamente podrías llamarlo un tope de gama, pero con un motor más orientado al uso urbano y claramente con un costo final no tan alto.

Las dimensiones son las mismas, colocándolo frente a los SUV subcompactos más grandes con 4.3 metros de largo, entre ellos el Chevrolet Tracker, Hyundai Creta y Peugeot 2008. Por fuera lo que lo caracteriza son sus faros LED que se extienden un poco hacia el centro de la parrilla, los faros de niebla en LED, las manijas de las puertas cromadas y, ahora exclusivo de esta versión, el quemacocos.

Interior amplio y cómodo

Por dentro el KIA Seltos SX lleva técnicamente lo mejor del equipo, salvo los detalles deportivos del GT Line. Por ello vamos a ver la pantalla de 10.25” con Apple CarPlay y Android Auto, cargador inalámbrico, aire acondicionado automático, selector de modos de manejo y un cuadro de instrumentos análogo, aunque con pantalla central de 3.5” en lugar de la de 7” que lleva el GT Line.

En cuanto a acabados no hay cambios realmente, los materiales son exactamente iguales, plásticos rígidos, apariencia y percepción de calidad al nivel del segmento. Aunque sí hay que decir que ese uso excesivo de plástico negro brillante en el marco de cuadro de instrumentos y pantalla se podría maltratar muy rápido por la naturaleza del acabado, sus peores enemigos son las huellas y los rayones.

Fuera de ello la comodidad es de lo mejor, tanto en la suavidad de asientos —que no llevan ajuste eléctrico para ningún ocupante—, o en el espacio para poder guardar nuestras pertenencias. La parte trasera goza de un gran aprovechamiento de espacio, pues con 1.75 metros de altura que tengo, puedo ir con espacio de sobra en toda dirección.

Su cajuela llega a 433 litros de capacidad, más que los 408 litros que su hermano el Hyundai Creta lleva, a pesar de compartir plataforma y cientos de componentes más.

Seguridad a la altura del segmento, pero con posibilidad de ser el referente

En seguridad llevamos también lo mejor de la familia Seltos, 6 bolsas de aire, frenos ABS, ESC y cámara de reversa. Elementos a los que KIA nos acostumbró en toda su gama y que siguen dejando atrás a varios rivales, sin embargo, ahora en una época donde cada vez más marcas los igualan en ese aspecto, e incluso llegan a superarlos, sería una gran adición el que añadieron al menos una alerta de punto ciego para destacar más.

Manejo más orientado a la ciudad y el día a día

El manejo del KIA Seltos SX es bastante apegado al lado urbano. Pues lleva el motor mismo motor aspirado de toda la gama salvo por el GT Line y su bloque turbo. Me refiero al motor aspirado de 1.6 litros de cuatro cilindros de 121 hp y 111 lb-pie de par, acoplado a una caja automática de seis cambios. El mismo motor que impulsa al popular KIA Rio.

Para ciudad y la vida urbana es suficiente para moverlo, con cierto cuidado puede tener niveles decentes de eficiencia entre 10 y 11 km/l aproximadamente, aunque no hay que negar que un motor de esas características a la altura de la Ciudad de México, pierdo algo de potencia por la disminución de oxigeno. Por ello en carreteras que te demanden subir aún más momentáneamente, el motor podrá llegar a forzarse por mantener el paso o ganar velocidad. Esto no es endémico del Seltos, lo es de todo este segmento y de cualquier motor aspirado de poder contenido, por eso los motores turbo hacen tanto sentido a estas alturas.

La configuración de la puesta a punto es bastante suave, prioriza que esos caminos de baches, acelerones y frenados bruscos sean lo más soportables posible. No hay reacciones bruscas, pero tampoco excesivamente blandas. Lo suficiente para que sepas qué pasa, pero tampoco en exceso como para abrumarte.

Si quieres intentar sacar más jugo de su conducción tenemos el selector de modos de manejo que permitirá estirar más los cambios y acentuar la rapidez de la respuesta del acelerador, o bien puedes buscar ahorrar más combustible con su modo Eco. Finalmente, el modo normal es un equilibrio entre ambos.

Una gama amplia para no dejar ni una sola parte del espectro libre

Como te mencionaba al inicio esta variante viene a ampliar la gama del Seltos para hacerlo aún más apetecible para cualquiera de las necesidades que sus clientes potenciales llegaran a tener. Además ayuda a llenar un hueco importante de precios entre la variante EX Pack y el GT Line que antes eran separados por unos 50,000 pesos.

Esta variante SX tiene un costo de 437,900 pesos y como acostumbra tiene por principales rivales al Chevrolet Tracker y su hermano, el Hyundai Creta.

KIA Seltos SX

$437,900

• Motor: 1.6 litros
• Potencia: 121 hp @ 6,300 RPM
• Par: 111 lb-pie @ 4,850 RPM
• Transmisión: Automática de 6 cambios
• Tracción: Delantera
• Frenos: Disco / disco
• Peso: N.D
• Velocidad máxima: N.D
• Aceleración 0-100 km/h: N.D
• Suspensión delantera: ndependiente tipo McPherson
• Suspensión trasera: Barra de torsión
• Longitud: 4,315 mm
• Cajuela: 433 litros
• Consumo urbano: 12.3 km/l
• Consumo en carretera: 13.7 km/l
• Consumo combinado: 15.3 km/l
• Capacidad del tanque: 45 litros
• Lugar de fabricación: India

Cifras ofrecidas por el fabricante.

[[actualizacion: {"text":"Agradecemos a Estacionamientos Deprisa para la realización de la sesión fotográfica. Para más información acerca de sus inst

En Motorpasión México

KIA Sorento 2021, a prueba: un SUV de tres filas que apuesta todo por cuatro cilindros y diseño