Lincoln Corsair y Aviator, manejamos dos SUV que vuelan sobre comodidad y tecnología (+video)
La comodidad de viajar en primera clase es muy endémica de marcas premium, así como todo el arsenal de equipo que pueden llevar para entretenernos y mantenernos seguros. En la mayoría de las marcas todos estos aditamentos son un opcional, pero en el caso del Lincoln, no. Ellos toman una ruta distinta en la búsqueda de destacar en el competido segmento de lujo, y sus Lincoln Corsair y Lincoln Aviator tienen varios argumentos para que pienses en ellos como una opción seria. Nos fuimos de ruta con estos dos vehículos y te contamos sus detalles.
Un Lincoln con esencia estadounidense, pero que no grita estar dirigido a adultos
Durante mucho tiempo Lincoln era percibida por muchos como una marca de coches de lujo para adultos que pasaban de los 40 años. Si bien eran elegantes, había mucha sobriedad en sus trazos. Afortunadamente, el nuevo rumbo de la marca ha creado productos que siguen gustando a los adultos, pero que también pueden encajar en los gustos de clientes más jóvenes.
En este apartado Corsair lleva ventaja pues el nuevo rostro de la marca ya no es de trazos inexpresivos. Tenemos un diseño fresco y elegante a la vez que con varios detalles de líneas de expresión sin duda alguna te harán ponerle atención a sus formas. Corsair lleva iluminación LED en ambos extremos, rines de 20" y acentos en cromo en una medida correcta y no excesiva como en el pasado. Con sus 4.5 metros de largo y 1.9 de ancho califica como un SUV compacto que podría tener entre sus rivales al BMW X3, Mercedes GLC y Audi Q5.
Aviator por su parte es un producto más grande que llega hasta los 5.06 metros de largo por 2.2 de ancho. Comparte plataforma con el Ford Explorer y gracias a ello lleva más poder y algunas ameninades superiores. A nivel diseño luce más robusto e imponente, con trazos más rectos en toda la carrocería. Al igual que Corsair, la iluminación exterior es LED, pero cuenta con unos enormes rines de 22" que complementan este nuevo diseño de la marca de una gran forma.
Comodidad de primera clase para navegar en ciudad o volar en carretera
El interior de los Lincoln tendía a verse muy similar a los de Ford, aunque con un par de plásticos de mejor calidad, más piel y elementos de equipo extra. Afortunadamente, ahora encontramos una identidad propia en cada uno de estos modelos.
En el caso de Corsair tenemos una distribución correcta de elementos que son fáciles de localizar y usar. En cuanto a percepción de calidad, tenemos materiales buenos como piel, madera y plásticos suaves. Los colores pueden combinarse en dos tonos con varias opciones de color que le dan un look más lujoso que el de los interiores totalmente en color negro. A pesar de ello también hay una notoria presencia de plásticos duros en zonas en las que tal vez no tengas tanto contacto con ellos, pero definitivamente los vas a notar.
El volante de ambos vehículos ofrece controles para distintos aspectos, y cada vez que entres o salgas de un menú, las opciones de acciones en el volante cambiarán, así se condensan más funciones sin tener que tener un sistema más complicado.
La comodidad de Corsair hace que los viajes sean tranquilos, los asientos frontales pueden llevar ajuste de 10 posiciones, calefacción y ventilación; en el caso del asiento del conductor, tendrás tres memorias. El volante también es calefactable y se puede ajustar en profundidad y altura de con sólo pulsar un botón.
Otros detalles de comodidad son el aire acondicionado automático de doble zona, sistema de infotenimiento con pantalla de 8" con SYN 3, Apple CarPlay, Android Auto, navegación y sistema de audio Revel by Harman de 14 bocinas que suena de maravilla; otros detalles son techo panorámico, cuadro de instrumentos análogo —para velocímetro y tacómetro— con computadora de viajes con pantalla de 6.5" a color.
Llevan selector de velocidades por botón, selector de modos de manejo, freno de estacionamiento electrónico e iluminación LED interior. En la banca trasera tenemos un buen espacio para tres personas, pues el túnel de transmisión no es tan grande. Estos asientos también tienen calefacción y frente a ellos encontramos salidas de aire acondicionado y dos puertos USB-B. Cabe destacar que hay mayor presencia de plásticos duros, aunque siguen dominando los suaves y los insertos de piel.
La cajuela por su parte es bastante amplia, cuenta con apertura eléctrica, tiene capacidad de 781 litros con asientos en su posición, abatidos, llega hasta 1,631 litros. Los asientos se pueden abatir con el toque de un botón y a través de una palanca se pueden deslizar al frente o atrás para generar más espacio para piernas o espacio de carga en cajuela; hay llanta de refacción ahorradora de espacio —es de 17"—, y también hay un poco de espacio extra bajo la cubierta.
En Aviator encontramos un interior considerablemente más amplio que afortunadamente también lleva su propia identidad con un ambiente muy premium. También hay plásticos duros en zonas de menor contacto, aunque en menor medida que Corsair.
En equipo encontramos detalles similares aunque reemplaza o mejora en llevar pantalla táctil de 10" aire acondicionado de cuádruple zona, asientos traseros con ventilación y calefacción, además de serie son de tipo capitán con opción a ser de banca, también llevan control con pantalla de 5.8" para navegación e infotenimiento. Los asientos delanteros tienen ajuste de 12 posiciones, cuadro de instrumentos digital y head up display. Aviator es una opción más amplia y con enfoque familiar, por ello ofrece una tercera fila de asientos, mejor aprovechada por niños debido al espacio para piernas, pero aún así más cómoda que la media de estas filas. Con asientos en su posición el espacio de carga es de 588 litros, si se abate la tercera fila, crece a 1,184 litros y con las dos filas abatidas llega a 2,200 litros.
Asistencias y seguridad de gran nivel
Ambos vehículos van a tope de asistencias, podremos encontrar cosas como freno autónomo de emergencia con reconocimiento de peatones, control de velocidad crucero adaptativo con lector de señales de tránsito, mantenimiento de carril, alerta de punto ciego, visión de 360º, estacionamiento autónomo, cámara de reversa con alertad de tráfico cruzado y freno autónomo, control de estabilidad, control de tracción, frenos ABS, luces altas automáticas, bolsas de aire frontales, laterales, de rodilla para piloto y copiloto, bolsas de aire de cortina para primera y segunda fila en Corsair, y para tercera fila en Aviator.
En este apartado Lincoln no escatimo para ofrecer un abanico enorme que podría ser un gran factor de decisión por parte de los posibles clientes de la marca.
Poder para desplazarte sin esfuerzo
Bajo el cofre Lincoln ha decidido usar algunos de sus mejores motores actualmente. En el caso de Corsair, pudimos probar la versión Reserve 2.3L que lleva un motor de cuatro cilindros de 2.3 litros turbo (Ecoboost) con 280 hp y 310 lb-pie de par que se acopla a una caja automática de 8 cambios y que transfiere el poder a las cuatro ruedas.
Esta máquina es suficiente para que Corsair tenga un manejo vivo con una buena respuesta, que sin problema alguno le permite pasar de los 180 km/h. Aunque definitivamente no se siente tan explosivo como algunos de sus rivales alemanes.
El control del auto es bueno y gracias a su suspensión adaptativa los baches e irregularidades tanto en ciudad como en carretera no son tan notorias, a pesar de llevar rines de 20". Un gran trabajo en ese apartado, pues aún a velocidades altas el vehículo transmite mucha seguridad y confianza cuando se le exige.
La dirección se siente suave y como en la actualidad su naturaleza electroasistida no transmite mucho, pero al menos tiene un buen balance de peso. Los frenos muerden con fuerza apenas tocas el pedal. Cuando usas los diferentes modos de manejo de inmediato sientes el cambio en suspensión, acelerador y transmisión, algo que me agradó bastante. El consumo que obtuvimos fue de 7.7 km/l, algo elevado, pero tengamos en cuenta que fue un primer acercamiento donde los conducimos por unas horas a un ritmo elevado.
En el caso de Aviator bajo el cofre tendremos un V6 biturbo de 3.0 litros con 400 hp y 415 lb-pie de par lleva una transmisión automática de 10 cambios que lleva todo el poder al eje trasero. Aviator definitivamente tiene más empuje al acelerar de una forma lineal que te hunde un poco en el asiento.
Dinámicamente se nota su enfoque en la comodidad, pues en curvas a pesar de plantarse bien, se nota el balanceo de carrocería y mucho peso al frente. Definitivamente puede ir fuerte y a altas velocidades, pero se disfruta más a un ritmo más tranquilo. La caja de 10 cambios hace un buen trabajo para entregar el poder como se debe, aunque en ocasiones los cambios son un poco bruscos y deja sentir una "patada" al decidir que marcha engranar.
Productos que tienen más de un punto para convencerte
Si lo tuyo es la comodidad como prioridad, un diseño agradable que no envejecerá rápido y seguridad, Lincoln tiene una oferta más que interesante. No son tan explosivos, lo sé, pero es justo eso lo que busca la marca; ofrecerte una experiencia distinta para sobrellevar el caos del tránsito en las ciudades o hacer ligeros los viajes largos en carretera.
Precios: Lincoln Corsair Reserve 2.0 - $977,500 | Lincoln Corsair Reserve 2.3 L - $1,023,800. | Lincoln Aviator Reserve - $1,548,800.
A su vez ofrecen pocas versiones y todas llegan con un nivel enorme de equipo que normalmente en otras marcas de lujo sería opcional, un detalle que a algunos podría gustarles. Sin embargo, consideraríamos oportuno que ofrecieran alguna variante con el mismo nivel de seguridad, pero tal vez con un poco menos de equipo no esencial como rines más pequeños, perder la ventilación o calefacción de asientos, menos posiciones de ajuste para asientos y demás para tener versiones a precios más accesibles.
Finalmente la percepción de calidad es muy buena, pero podría mejorar si se minimizará la presencia de plásticos duros en algunas zonas, que a pesar de no estar tan en contacto con nosotros, se llegan a notar. Fuera de ello tanto Lincoln Corsair como Lincoln Aviator no deberían pasar desapercibidas por tu radar.
