De entre tantas presentaciones que se llevaron a cabo en Ginebra, destaca un coche color criatura acuática —ahora que están tan de moda— que pronto estará disponible. Se trata del BMW M8 Gran Coupé, un concepto que destacó y causó un nivel de interés pocas veces visto.
Desde 1999 no hemos podido disfrutar de un BMW tan estilizado como lo será la nueva generación de la Serie 8, que conocimos el año pasado. En el Salón de Ginebra, la marca bávara se adelantó a presentar una versión de cuatro puertas de alto desempeño a la que llamó: M8.
Es un concepto que precede a un coche emocional, elegante, súper deportivo, y único en su especie. Será, nada menos que el nuevo auto insignia de la marca, teniendo como paralelo al Serie 7, el eterno "limousine" más codiciado en el mundo.
Dentro de los rasgos modernos y de imagen agresiva del M8, se pueden apreciar los icónicos trazos que identifican a la marca, como la parrilla doble de riñón, o los faros redondos. El perfil es bajo, de frente se aprecia ancho y muy aerodinámico, además de un poco siniestro, como debe de ser un auto exótico.
La pintura con la que fue presentado se conoce como Salève Vert, que cambia entre verde y azul con tonos grisáceos depende de la iluminación que lo cubra. Los accesorios M están presentes en la salida de escape, cálipers, rines y las branquias laterales.
El futuro de la marca está enfocado en la gama alta. La nueva Serie 8 estará disponible pronto y contará con motores tan potentes como eficientes. Tanto la versión coupé como la de cuatro puertas como este M8 Concept serán presentadas oficialmente en 2019.