“La industria automotriz se está hundiendo en la crisis”. Con esas palabras sentenció el instituto de investigación alemán IFO la situación actual respecto a las empresas automotrices en el país europeo, mientras Volkswagen, Mercedes-Benz y BMW reportaron pobres resultados trimestrales.
Alemania, como sede de estos tres fabricantes, mide el pulso de la industria del motor para Europa. Las ventas de sus vehículos hablan mucho del avance o retroceso de tendencias y tecnologías, y en esta ocasión, la adopción de sus coches eléctricos se está topando con una muralla china.
“La falta de pedidos está pesando en el desarrollo económico de Alemania”, se lee en otro reporte del instituto IFO, que analiza todas las industrias manufactureras de ese país. Según el organismo, 43.1% de la industria automotriz alemana reportó escasez de pedidos, o lo que es lo mismo, baja demanda.
Los eléctricos arrastran pérdidas
Los culpables de la crisis son la baja en ventas de vehículos eléctricos y la fuerte competencia de parte de los fabricantes chinos. El impacto llega al doble: el mercado chino no está comprando tantos autos de fabricantes alemanes como se esperaba, pues el país sufre una profunda crisis inmobiliaria. Por otro lado, las marcas chinas están inundando el mercado mundial de sus propios vehículos, con BYD y MG pisando el acelerador eléctrico.
Según Bloomberg, las marcas alemanas gastaron miles de millones de dólares en mejorar su tecnología de vehículos eléctricos, pero el mercado va a la baja. Este problema se acentuó después de que varios países retiraron los subsidios a los compradores de EVs, lo que había sido un gran impulso a las ventas en años anteriores.
De momento, las expectativas del negocio automotriz alemán cayeron a -18.3 puntos en julio, desde -9.5 puntos en junio, de acuerdo con IFO. Es un reflejo de los resultados trimestrales de las armadoras, como Mercedes-Benz, que recortó sus expectativas de ganancias, y Volkswagen, que tuvo un inicio de año lento.
En los primeros seis meses del año, las ventas de Porsche han caído casi 20%, y las de Audi 17%. Mercedes, Volkswagen y BMW reportaron bajas de ventas en 12%, 11% y 9%, respectivamente.
Por otro lado, retrasos en entregas y problemas en la cadena de suministro han causado retrasos en nuevos modelos de autos eléctricos como el Citroën e-C3 o el Peugeot E-3008, marcas del grupo Stellantis. Con todos estos inconvenientes, tocará ver de cerca cómo se mueve la industria durante el resto del año.
