El Jaguar i-Pace está listo y no le tiene miedo al futuro ni al Tesla Model X
A Jaguar le tomó tiempo desarrollar su SUV eléctrico, no por falta de ideas ni de interés, sino por un meticuloso proceso de ingeniería que terminó dando como resultado al i-Pace: el SUV que se convierte en la punta de la lanza del fabricante británico en materia de movilidad eléctrica.
Su carta de presentación es una batería de ion-litio de 90 kWh, con capacidad de recargarse al 80% en sólo 40 minutos utilizando un cargador rápido de 100 kW. En Jaguar hablan de una autonomía de 480 kilómetros, una aceleración de 0 a 100 km/h en 4.8 segundos y capacidades de manejo extraordinarias bajo todo tipo de condiciones.
En una toma de corriente casera toma 10 horas recargar el 80% de las baterías.
Para moverse, el Jaguar i-Pace utiliza dos motores eléctricos, uno para cada eje, que desarrollan un total de 400 hp y 513 lb-pie de par. Las baterías están colocadas al centro y muy abajo, de manera que la distribución de peso queda en un estupendo reparto 50:50 entre cada eje. Al llevar dos motores, utiliza un esquema de tracción integral.
La fase de desarrollo involucró diferentes climas para poner a punto la adherencia del vehículo y el comportamiento de las baterías según la temperatura. El i-Pace tuvo que enfrentarse a climas de hasta -40 ºC —que son 10 grados menos de lo usual en este tipo de vehículos. Utiliza un avanzado sistema de enfriamiento o calentamiento de las baterías según las necesidades. Es capaz de abrir o cerrar la sus ventilaciones externas en favor de la aerodinámica y del comportamiento térmico de su fuente de energía.
Naturalmente, aprovecha algunos de los últimos desarrollos de la casa, como una suspensión de aire (opcional) con amortiguación variable. Estrena una arquitectura de aluminio de alta rigidez; es el Jaguar con mayor rigidez torsional que se haya fabricado en la historia.
Tan grande como un F-Pace, pero más espacioso
El Jaguar i-Pace mide 4,682 mm de largo, por lo que su talla no queda muy lejos del F-Pace. De cualquier forma, incluso con baterías bajo la cabina, el i-Pace promete un habitáculo más amplio, del nivel de un SUV de categoría superior, gracias a una distancia entre ejes de 2,990 mm y un piso plano —no hay necesidad de un túnel de transmisión. Hay, además, múltiples espacios para guardar objetos y una cajuela de 656 litros.
La cabina es de diseño futurista y obedece a todas las tendencias de conectividad actuales. El i-Pace incluso aprovecha inteligencia artificial para reconocer las preferencias del conductor y adaptar parámetros de manejo y del habitáculo. El sistema de navegación analiza la topografía de la ruta y retoma información de viajes anteriores, incluyendo el modo de conducir de su propietario, para ofrecer un rango de autonomía personalizado y estatus de carga precisos.
Su sistema de infotenimiento es el Touch Pro Duo, uno de los más avanzados de la industria que incluye una innovadora combinación de pantallas táctiles, sensores capacitivos y controles táctiles físicos. Hay conexión 4G Wi-Fi, funciones que puedes controlar desde el smartphone y un puerto USB para cada uno de los cinco pasajeros.
En lo que respecta a la selección de materiales, puedes estar por seguro que será tan sofisticado como cualquier otro Jaguar. La marca habla de la posibilidad de elegir entre acabados naturales y de sensación hi-tech, como piano black, madera satinada o aluminio.
El Jaguar i-Pace está listo para el mercado
Su diseño parece el de un prototipo, pero a la vez hace un guiño de ojo a la gama actual de la marca. Si hay algo que llama la atención es que no lleva un diseño que lo delate como vehículo eléctrico. Mientras la mayoría de los EV se despiden de las tomas de aire, el difusor o la parrilla, el i-Pace los presume con una silueta que, además, está inspirada en el superdeportivo de la casa, el C-X75.
El vehículo será presentado en el Auto Show de Ginebra y ya está disponible para pedido en algunos mercados en tres diferentes versiones: S, SE y HSE. Su competidor directo será el BMW X3 eléctrico que viene en camino y el bien posicionado Tesla Model X, aun con una carrocería más grande, más asientos y tecnología autónoma.