Nissan presentó cuadro nuevos conceptos como parte de su nueva estrategia a futuro a la cual nombraron Nissan Ambition 2030, la cual busca impulsar la movilidad ante las necesidades críticas del medio ambiente.
La estrella del repertorio fue el Chill-Out, un crossover que toma como base la plataforma CMF-EV y que a simple vista destaca su aspecto futurista, un espacio considerable para el interior y promete tecnologías de seguridad avanzada y la integración de la batería de estado sólido para su funcionamiento, aunque aún no se sabe si este llegaría en algún momento a las líneas de producción.
También el Nissan Max-Out fue una de las premisas de la marca, un modelo que básicamente gira en torno a un concepto convertible de dos plazas que aprovecha el espacio interno gracias a los asientos que se abaten para beneficiar a los conductores sin pasajeros, sus principales características son que tendría un centro de gravedad muy bajo, contaría con el sistema de tracción para EV de la marca e-4ORCE avanzado y por supuesto, sería ultraligero.
Otro de los protagonistas fue Surf-Out, formando parte de esta historia como una visión bastante desarrollada de una pickup que facilitaría la conducción sin importar el terreno con un rendimiento fuera de serie, tracción e-4ORCE, espacio de carga extendido y su capacidad de carga que no se vería limitada por las características eléctricas del tren motriz.
Finalmente está el Nissan Hang-Out, un SUV que engloba un piso completamente plano desde la parte frontal hasta la posterior y cuya concepción partió de la visión de distribución interior de los vehículos, además, contaría con tecnología ProPILOT y al igual que los anteriores, tracción e-4ORCE.
Aunque hasta el momento se desconoce si alguno de estos modelos está contemplado para la producción, la compañía deja claro sus planes de evolucionar la movilidad eléctrica a la brevedad y es que, con una inversión de más de 17,000 millones de dólares para los próximos años, desea traer a la vida 23 nuevos vehículos electrificados, 15 de ellos 100% eléctricos, acercándose cada vez más a la descarbonización planeada para el año 2050.