A partir del primero de abril, el gobierno de Hong Kong eliminó los incentivos fiscales que otorgaba a los autos 100% eléctricos, lo que ha provocado que las ventas de Tesla en el territorio se desplomen. Según el Wall Street Journal, el Departamento de Transporte de Hong Kong reportó que no se registró ningún Model S o Model X nuevo durante los meses de abril y mayo, con sólo cinco vehículos eléctricos registrados en ese tiempo.
Cuando se anunció en febrero pasado que los incentivos fiscales desaparecerían, la venta de autos eléctricos se disparó y durante el primer cuarto del año Tesla****** registró **3,700 ventas, de las cuales 2,939 fueron en marzo. La diferencia de precios entre antes y después de los incentivos fiscales es considerable. El precio de un Model S antes del primero de abril era de poco menos de 75 mil dólares, mientras que ahora ronda los 130 mil dólares.
Este ha sido un golpe muy fuerte para Tesla en la región, aunque aseguran que no dependen de los incentivos que los gobiernos otorgan para vender sus autos. Aunque esa sea la postura oficial de la marca, queda claro que mucha gente está volteando a ver a los autos eléctricos en gran medida gracias a la reducción de precio que obtienen por parte de los gobiernos.
Parece que la nueva tendencia será eliminar estos incentivos para crear un mercado “justo” en el que todos los autos deberán pagar los mismo, sin importar qué tipo de motor utilicen. Dinamarca es otro país que está siguiendo este razonamiento y habrá que esperar para ver si alguien más se une a la tendencia. Afortunadamente hay otros como Francia que están haciendo todo lo contrario.
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