Cada vez son más países los que le están declarando una guerra abierta a los vehículos de combustión interna, pero hay maneras diferentes de hacer esto. Noruega planea que para 2025 el 100% de los autos nuevos que se vendan en su territorio sean eléctricos. Pero no planean lograr esto prohibiendo los vehículos con motor de combustión, sino con incentivos fiscales lo suficientemente atractivos para que la gente tome la decisión por si misma.
Según un comunicado de la Asociación Noruega de Vehículos Eléctricos, durante 2015 los vehículos eléctricos representaron 22% de las ventas en el país nórdico. Este impresionante número se debe en gran medida a los incentivos fiscales que el gobierno otorga a este tipo de vehículos desde 1990. Pero los incentivos no son sólo fiscales y aparte de la exención del 25% de impuesto de compra, también incluyen acceso a los carriles exclusivos para transporte público y estacionamiento gratis.
La manera en la que Noruega está abordando el tema no es prohibiendo los vehículos de combustión, o incluso multando a la gente que prefiere estos vehículos, simplemente los autos que contaminan más deberán pagar más en comparación con los eléctricos y así esperan que la gente decida por si misma el hacer el cambio a un vehículo eléctrico.
Si su plan funciona, deberán aumentar su red de cargadores para autos muy pronto ya que deberán tener un cargador por cada 10 vehículos eléctricos, lo que se traduce en cerca de 25 mil cargadores públicos para 2020. En 2015 sólo contaban con 1350 cargadores, por lo que tienen mucho trabajo que hacer. También están planeando tener al menos dos estaciones de carga por cada 50 kilómetros en cada carretera importante. Las metas que se ha propuesto Noruega son ambiciosas, pero servirán de ejemplo a toros países para demostrar que un cambio así de importante es posible.
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